Hoy me siento como esta rama: seca, dura, rígida, abandonada al incesante ir y venir de las olas en la playa.
Entre el insomnio y la lluvia estoy hecha un asco. Lo bueno es que hoy, al menos conservo el humor...a ver cuanto me dura cuando me ponga en movimiento.
Estiro un brazo y nada...vamos bien. Estiro el otro y el dolor me obliga a cerrar los ojos y respirar hondo.
Apoyo los pies en el suelo y como siempre tengo que esperar un poco. Duele, cuesta caminar.
Hoy, además de las muñecas, me duelen los dedos, me cuesta escribir. Pero escribo y me muevo y me levanto y sonrío. A veces más y otros menos.
Aunque llueva. Aunque no haya dormido.
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2 comentarios:
Gracias por interesarte por mi blog. A partir de ahora yo también seré seguidora del tuyo, lo tengo un poco aparcado porque estoy pasando por un mal momento personal. Me ha gustado leer tus sensaciones, porque son mis sensaciones, es lo que nos une a las personas afectadas de fibromialgia, que al menos nosotras nos entendemos. Un beso enorme
Gracias a ti Chely. Todo este mundo nuevo acaba de abrirse ante mi y aún estoy aprendiendo a reconocer algunas cosas, pero saber que alguien te entiende es lo más importante.
Un abrazo muy fuerte (de los que no duelen)
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